Guiándonos hacia el Amor Divino

Subscribase para recibir correos electrónicos con las últimas noticias y actualizaciones

 

WWW. AMORDIVINODEDIOS.ORG
La página web oficial de

 

Foundation Church of the New Birth, Inc.

Disponible ahora para descarga gratis
El Verdadero Evangelio Revelado Nuevamente por Jesús
Volumen I, en formato PDF.

Haz Click aquí

Bienvenido a nuestra página web! Les ofrecemos verdades profundas que Jesús reveló durante su vida en la tierra, y desea que hoy las conozcamos. El siguiente ensayo fue escrito por el Dr. Daniel G. Samuels y revela algunas cosas que quizás no hayan oído en otro lugar:

 


LA VERDADERA MISIÓN DE JESÚS

 Book Section 7

Redención Del Pecado, Continuado……

Por lo tanto, las almas en sufrimiento eventualmente aprenden a renunciar a sus inclinaciones malvadas, ya sea afición al dinero, posesiones, gratificación de placeres o el deseo de hacer daño a otros – avaricia, lujuria, codicia, odio, envidia, injusticia y otras creaciones pecaminosas del corazón humano – y emplean su voluntad y facultades intelectuales para lograr el olvido de las cosas que azotan al alma con remordimiento. Pero el alma en sufrimiento y oscuridad también podrá buscar ayuda fuera de sí, si así lo desea: el Amor Divino del Padre Celestial, que al ser derramado en el alma, que con sinceridad busca Su Amor, causa la purificación de aquella alma a través de la posesión del Amor, forzando así, la expulsión de las excrecencias que contaminan y mancillan el alma; y, de hecho, a medida que el Amor del Padre continúe llenando el alma de aquel que lo busca, el alma humana se transforma en un alma divina llena de la naturaleza y esencia misma de Dios, Su Amor, reflejando, así, el Alma de Dios. Con este Amor, el alma experimenta un cambio, y las perversidades que la contaminaron son erradicadas, así como la memoria de las mismas, a fin de que no haya nada sobre lo cual la ley de compensación pueda operar, y el alma se libera de su operación inexorable. Pues, el alma, al pedir el Amor de Dios con sinceridad y anhelo, invoca una ley superior de amor, y el alma, que una vez fue malvada, ahora llena del Amor de Dios, misericordia, bondad, consideración, piedad y compasión, progresa de su morada de oscuridad y sufrimiento, a reinos de amor y luz, y eventualmente a los Cielos Celestiales, donde únicamente aquellas almas que poseen Su Amor en abundancia pueden entrar. Jesús es el Maestro de los Cielos Celestiales, donde los habitantes son poseedores del Amor del Padre en sus almas, a un grado donde son conscientes de su inmortalidad. Pues, el Alma de Dios, siendo inmortal, aquellas almas que poseen Su Amor en grado suficiente también son inmortales.  Esto es lo que quiso decir Jesús cuando dijo, “El Padre y yo somos Uno”. Quiso decir, que hubo una unión entre el Alma de Dios y la Suya, por la gran abundancia del Amor del Padre que él poseía, dándole conciencia de que él, así, era el hijo verdadero y redimido del Padre. Él no quiso decir, como algunas iglesias erróneamente interpretaron sus palabras, que él era Dios, o igual a Dios; sólo que hubo una afinidad entre la naturaleza de su alma y aquella de Dios, que fue establecida por su posesión del Amor del Padre a través de la oración.

En resumen, hemos llegado a la verdadera explicación del “perdón”, que es sorprendentemente diferente al concepto tradicional impuesto a los mortales por las iglesias. Dios no perdona el pecado arbitrariamente; más bien, Dios ayuda a aquellos que, verdaderamente arrepentidos y contritos, acuden a Él en busca de su perdón con la intención de enmendar sus errores. Él, por lo tanto, envía al Espíritu de Dios para fortalecer el alma que, por su propia voluntad, trata de evitar el pecado y error, o, en respuesta a la oración, envía a su Espíritu Santo para llevar Su Amor al alma para que Su propia naturaleza y esencia puedan ayudar a erradicar las perversidades contra las que aquella alma ha estado luchando.

De igual manera, Jesús pone al descubierto la esterilidad del concepto tradicional de “el día del juicio”. No se trata de poner en una balanza las buenas y malas obras cometidas por el hombre durante su vida terrenal; tampoco es un tiempo vago indefinido en el que la tierra será destruida y las almas de los hombres sean juzgadas para condenación, o la resucitación a la vida física de la tumba. Pues, como dice San Pablo en Corintios “la carne y la sangre no pueden heredar el Reino”. Y María, la madre de Jesús, explica que la carne del cuerpo sin vida debe volver a los elementos de acuerdo con la ley de Dios, y que, por lo tanto, cualquier escrito sobre el hecho de que ella ascendió al cielo en carne, es mera especulación e ilusión de parte de aquellos que la enaltecen, debido a la relación con su hijo. María indica que ella, en realidad, siendo un espíritu lleno del Amor del Padre, es habitante de un Reino muy alto en los Cielos Celestiales, pero no por ninguna relación con Jesús, sino por la propia condición excelsa de su alma.

Eventualmente, declara Jesús, todas las almas progresarán de su condición de sufrimiento e infelicidad y alcanzarán ya sea la sexta esfera, conocida por los hebreos como el Paraíso (pues tal es la condición del hombre que posee un alma pura, sea en la carne o desprovisto de ella), o aceptarán el camino hacia el Amor del Padre para alcanzar los Cielos Celestiales. El hombre natural perfecto, sin embargo, llegará eventualmente a un estado de estancamiento, pues llega el momento en que él ya no podrá avanzar más allá de la perfección de su alma humana; pero el alma que posee el Amor del Padre continúa recibiendo Su Amor a través de toda la eternidad, puesto que es infinito, y el alma, así llena de la esencia del Padre, lo continúa recibiendo cada vez más y, como resultado, progresa más y más cerca de la Fuente Suprema de la morada del Padre, con un conocimiento mayor de cosas divinas y obteniendo felicidad y júbilo, como hijo Divino del Padre.

Con el deseo de explicar las condiciones de la vida del espíritu y del alma, Jesús enfatiza sobre la absoluta falsedad de la reencarnación. Él afirma, y los antiguos espíritus del Este han escrito para corroborarlo, que, aunque esta teoría es aceptada por los devotos de culturas Orientales, la reencarnación nunca ha sido un hecho en el mundo espiritual, y que los creyentes en esta idea estéril han estado esperando en vano durante incontables millares de años para ser reencarnados. Jesús, y otros espíritus superiores, indican que el alma no puede ser separada de su cuerpo espiritual, una vez haya sido adquirido a través de la encarnación, y que únicamente las almas sin el cuerpo espiritual pueden ser encarnadas. Por lo tanto, explica Jesús, el alma progresa del pecado a la pureza o transformación divina en el mundo espiritual, que nunca más puede abandonar, excepto para materializar brevemente en sustancia material con la ayuda prestada por médiums. El concepto oriental de la renuncia o expiación del pecado del alma, agrega Jesús, es correcto, ya que es la doctrina que establece que el alma eventualmente eliminará los males que la mancillan, pero el error consiste en designar la tierra como el lugar donde ocurre tal expiación, y enseñando que el alma, al liberarse de sus iniquidades, también pierde conciencia de sí misma como una entidad personal, a través de la absorción del alma en la Deidad.

En relación a la vida en el otro mundo, uno de los más interesantes escritores sobre espíritus, es el vidente, Swedenborg, quien nos habla acerca de sus experiencias en el mundo de los espíritus. Él declara – y aquí Jesús corrobora sus mensajes – que, de hecho, se le permitió ir al mundo espiritual en un estado de trance, y que realmente vio las esferas y las condiciones de los espíritus como eran en el siglo XVIII. Swedenborg nos dice que, en todo el mundo espiritual, fue informado que Dios es Uno, y que un Dios trino, según la creencia de los cristianos, no es más que una ficción piadosa. Él afirma que habló con Jesús, quien confirmó esto, pero que pensó que Jesús, siendo mucho más brillante y glorioso que todos los demás en el reino espiritual, éste mismo Jesús debe ser Dios, y así lo declaró en sus escritos. Swedenborg relata que fue informado sobre el Amor Divino, pero que no entendió, en realidad, el significado de lo que Jesús y los espíritus superiores querían dar a entender al respecto.

Hay un aspecto importante que los mensajes aclaran, y ello es, el significado verdadero de la doctrina de lo “divino dentro de sí”. Jesús realmente trajo consigo lo divino al predicar a lo largo de la Tierra Santa cuando él estuvo en la tierra y caminó entre los hombres; el Reino estaba con los hombres, pero no dentro de ellos. Cuando los predicadores hablan de lo divino dentro del hombre, ellos se refieren realmente al alma, la creación de Dios, un alma humana con todo, pero no divina. Lo que infieren, entonces, es que el desarrollo de lo divino dentro del hombre, debe ser visto como el simple desarrollo de los poderes latentes en el alma humana, a través del desarrollo de la voluntad y el amor natural humano, por medio del crecimiento moral e intelectual. Éstos, por supuesto, fueron otorgados al hombre cuando fue creado, sin participación de lo divino. Lo Divino en el alma humana es el Amor Divino que sólo llega mediante oración al Padre. Lo Divino llega de afuera, de parte del Padre Celestial y puede ingresar en el alma y efectuar su transformación, solamente cuando el alma lo busca con anhelos sinceros. Cuando Jesús habló a sus discípulos acerca de la divinidad dentro de ellos, estos discípulos tenían algo de este Amor en sus almas, incluso antes del Pentecostés, cuando, a través del Espíritu Santo, el Amor del Padre fue derramado sobre ellos en gran abundancia.

 

Haga click aquí para continuar leyendo

1   2   3   4   5   6   7

He aquí una página (haga click aquí) con algunos extractos de nuestra literatura
Haga Click qaquí para escuchar nuestro podcast!
Haga su Donación

Por favor presione sobre la imagen de este libro para ingresar a Amazon.com si desea comprar una copia de este volumen. Y si desea leer o imprimir una copia del libro libre de costo, presione la pestaña en la parte superior de la página, en la pestaña titulada: "El Verdadero Evangelio Revelados Nuevamente Por Jesus, Vol. 1."